Identificación y atención de la psicosis

¿Qué es la salud mental?

La salud mental incluye el bienestar emocional, psicológico y social. Está relacionada con la forma en que pensamos, sentimos, actuamos, tomamos decisiones, nos relacionamos con las demás personas y enfrentamos el estrés cotidiano. La salud mental es importante en todas las etapas de la vida, desde la niñez y la adolescencia hasta la edad adulta y la vejez (Organización Mundial de la Salud, 2018).

Los problemas de salud mental son comunes y pueden afectar a personas de cualquier sexo, edad, nivel socioeconómico o cultura. Afectan nuestras emociones, pensamientos, estado de ánimo, comportamiento y en general, nuestra salud y calidad de vida.

Están determinados por múltiples factores sociales, psicológicos y biológicos (por ejemplo, problemas económicos, condiciones de trabajo estresantes, discriminación de género, exclusión social, estilos de vida poco saludables, exposición a la violencia, problemas de salud, violaciones a los derechos humanos, antecedentes familiares de trastornos mentales, etc.). 

A lo largo de la vida podemos tener diferentes problemas de salud mental que pueden ser leves, moderados o graves, pueden ser pasajeros o duraderos (Organización Mundial de la Salud, 2022).

Afortunadamente, los problemas de salud mental son tratables y, por esto, es importante identificarlos y tratarlos de forma oportuna para disminuir sus repercusiones a largo plazo. El autocuidado puede ser clave para mantener nuestra salud mental y servir de apoyo para el tratamiento y recuperación, en caso de que tengas algún trastorno mental (Instituto Nacional de la Salud Mental, 2022).

Si quieres conocer más sobre el cuidado de la salud mental, puedes acceder al siguiente apartado: recomendaciones para el cuidado de la salud mental.

¿Qué son los trastornos mentales?

Los trastornos mentales se caracterizan por diversas alteraciones en las emociones, el estado de ánimo, el pensamiento y el comportamiento.

Generalmente se asocian con un importante malestar emocional y problemas para funcionar adecuadamente en las diferentes áreas de la vida (personal, familiar, social, educativa, laboral, etc.).

De acuerdo a cifras recientes de la Organización Mundial de la Salud (2022), una de cada ocho personas en el mundo padece un trastorno mental. 

Existen diferentes tipos de trastornos mentales, cada uno con características específicas y diferentes niveles de gravedad (por ejemplo, depresión, ansiedad, trastornos de la personalidad, trastorno por estrés postraumático, esquizofrenia, etc).

La mayoría de los trastornos mentales graves suelen aparecer de forma gradual y progresiva en la adolescencia o al comienzo de la edad adulta.

La gravedad de los trastornos mentales depende de diversos factores, recursos o condiciones con los que cuenta cada persona para hacer frente a las situaciones estresantes o de riesgo (por ejemplo, habilidades sociales, apoyo social, inteligencia emocional, formas de resolver los problemas, etc.).

Si quieres conocer más sobre los trastornos mentales, puedes acceder al siguiente enlace de la Organización Mundial de la Salud: https://www.who.int/es/news-room/fact-sheets/detail/mental-disorders

¿Qué es la psicosis?

La psicosis es un estado mental en el que hay una desconexión o pérdida de contacto con la realidad

Las personas que experimentan psicosis pueden presentar diferentes síntomas psicóticos que afectan la forma en que se percibe la realidad (ej. alucinaciones) y provocan alteraciones en el pensamiento (ej. delirios o creencias falsas), la comunicación (ej. discurso incoherente), las emociones y el comportamiento. 

Por eso resulta difícil para la persona con psicosis diferenciar lo que es y lo que no es real. 

¿Qué causa la psicosis?

La psicosis puede aparecer por diferentes causas (multicausal) y se manifiesta de forma diferente en cada persona.

Puede ser causada por lesiones, infecciones o inflamaciones en el cerebro, enfermedades neurológicas, trastornos metabólicos, intoxicaciones, por el consumo de algunas sustancias o medicamentos. 

La psicosis también puede ser el origen de un trastorno mental como la esquizofrenia, el trastorno bipolar y otros trastornos psicóticos.

Para poder establecer la causa de la psicosis, es importante acudir con un especialista en salud mental para que realice diferentes estudios, evaluaciones y entrevistas para poder determinar el origen y el tratamiento específico.

¿Cuáles son los principales síntomas psicóticos?

Síntomas psicóticos

Los síntoma psicóticos son diversos y se presentan de forma diferente en cada persona.

Los principales síntomas psicóticos que también se denominan síntomas positivos son: ideas delirantes, alucinaciones y desorganización (del pensamiento, el lenguaje y el comportamiento). 

En los diferentes trastornos del espectro psicótico como la esquizofrenia, también pueden estár presentes otros tipos de síntomas como los síntomas negativos (por ejemplo, no poder expresar las emociones, falta de motivación o incapacidad para sentir placer), los síntomas cognitivos (relacionados con problemas en la concentración, atención y memoria), los síntomas psicomotores (agitación o enlentecimiento de los movimientos y el habla) y los síntomas afectivos (tienen que ver con cambios en el estado de ánimo que incluyen depresión o manía).

Aproximadamente el 40% de los sujetos con psicosis efectúan un intento de suicidio a lo largo de su vida.

El riesgo de suicidio aumenta durante el primer año después del diagnóstico, desciende progresivamente durante los dos años siguientes y vuelve incrementarse posteriormente y de forma constante.

¿Cuáles son los síntomas positivos?

  • Los síntomas positivos muestran la presencia de algo que no debería estar.
  • Los médicos pueden llamar a estos síntomas “positivos”, pero eso no significa que sean buenos.
  • Estos síntomas hacen que te comportes de una manera inusual y absurda, que tengas pensamientos e ideas falsas y que percibas la realidad de manera diferente a los demás.
  • Incluyen delirios, alucinaciones, discurso y comportamiento desorganizado, e inmovilidad.

Delirios o creencias falsas

Los delirios son interpretaciones o creencias erróneas de la realidad, que es firmemente sostenida por el sujeto, a pesar de que haya pruebas o evidencias de lo contrario.

La persona que tiene un delirio está absolutamente convencida de que lo que le sucede es real, a pesar de ser algo irracional o incompatible con la lógica o forma de pensar habitual de la persona.

Hay muchos tipos de delirios y el contenido varía de una persona a otra.

Delirio de persecución: sentirse observado o perseguido. Por ejemplo, puedes creer que alguien te vigila o espía, que alguien quiere hacerte daño o que te persiguen.

Delirio de grandeza: sentirse alguien muy importante o con poderes sobrenaturales. Por ejemplo, creer que eres otra persona, como una artista famoso/a o que tienes súper poderes.

Delirio autoreferencial: estar convencido de que alguien te envía mensajes a través de la televisión, la computadora o la radio.

Deliro místico-religioso: estár seguro de tener una relación especial con una divinidad o de ser el elegido.

Delirio somático: estar seguro de tener una enfermedad o que algún órgano no funciona cuando no hay evidencia de ningún probelma de salud.

Otros tipos de delirios: También puedes sentir que los demás pueden leer tu pensamiento, controlan tus movimientos, o sientes que no puedes controlar tus propias acciones.

Alucinaciones o alteración de la percepción de la realidad

  • Una alucinación es la percepción de una imagen, un objeto, un sonido o un estímulo exterior que no existen pero son considerados como reales.
  • Existen diferentes tipos de alucinaciones que implican alteraciones en la percepción de cualquiera de los sentidos (vista, oído, olfato, gusto, tacto o sensaciones corporales) en ausencia de un estímulo real. 
  • Las alucinaciones más comunes en la psicosis son las auditivas y las visuales, es decir escuchar o ver cosas que no están ahí o que otros no ven ni escuchan.

Pensamiento y lenguaje desorganizados

  • Alteraciones en la forma en la que fluyen o se estructuran las ideas, dificultades para concentrarse o seguir una conversación.
  • El pensamiento puede acelerarse o volverse excesivamente lento.
  •  Se tiene la sensación de no poder organizar los pensamientos. 

Comportamiento desorganizado

  • Comportamientos inusuales, extraños o inapropiados (por ejemplo, reirse cuando alguien está hablando de algo triste, llevar abrigo cuando hace mucho calor, hablar solo, etc.), descuidar la higiene, estar muy inquieto/a o irritable sin una causa aparente.
  • Una manifestación grave del comportamiento desorganizado es la catatonia que se caracteriza por una mínima reacción al entorno, posturas rígidas, extrañas o inapropiadas y otras alteraciones del movimiento.  

¿Cuáles son los síntomas negativos?

Los síntomas negativos se caracterizan por una disminución en la intensidad, la capacidad de sentir y expresar las emociones.

Pueden hacer que seas menos capaz de hablar, pierdas el interés en actividades o no seas capaz de seguir haciéndolas.

También puedes experimentar apatía, falta de energía o motivación, dificultad para expresar las emociones y aislamiento social.

Aplanamiento afectivo: significa que en ocasiones no hablas mucho ni expresas tus sentimientos y no logras empatizar con otras personas. Tu voz puede sonar plana, sin emoción, ni modulaciones. Esto puede causar períodos de aislamiento y soledad.

Alogia (pobreza del habla): Se refiere al empobrecimiento del pensamiento y de la cognición, se manifiesta a través de tu capacidad de hablar o de entender el lenguaje (tanto hablado como escrito). Puede resultar difícil iniciar o participar en una conversación, puedes olvidar lo que querías decir y tardar en responder.

Abulia: Te falta energía, impulso o interés por muchas cosas. Te resulta muy difícil comenzar una nueva actividad o terminar lo que estás haciendo. Puede ocasionar problemas con tu aseo e higiene, sentimiento de cansancio, lentitud y agotamiento.

Asociabilidad: No tienes interés en actividades sociales, tienes poca o ninguna relación con las personas.

Anhedonia: No sientes placer o interés en actividades que antes disfrutabas.

¿Cuáles son los síntomas cognitivos en la psicosis?

Principales síntomas cognitivos en pacientes con psicosis

¿Qué es la cognición social?

¿Qué son los sesgos cogntivos?

¿Cuáles son los síntomas afectivos en pacientes con psicosis?

Depresión

La depresión es un estado de ánimo en el que la persona se siente triste la mayor parte del tiempo durante varias semanas, anisoso/a, inútil, irritable o frustrado/a, se pierde el interés por las actividades que antes disfrutaba, hay dificultad para concentrarse, se pierde el interés por salir con los amigos o familiares, hay dificultades para dormir, se pierde el apetito o se come en exceso y se tiene una sensación de agotamiento.

Cuando la depresión es grave, puede haber ideas o intentos de suicidio

Manía

La manía se caracteriza por un estado de ánimo de euforia, alegría y optimismo exagerado que no son habituales en la persona, hiperactividad, exceso de energía, poca necesidad de dormir, verborrea (no parar de hablar), aceleración del pensamiento,  excesiva autoconfianza y en algunos casos irritabilidad. 

¿La psicosis es un síndrome?

¿Cuáles son los primeros signos que nos permiten identificar la psicosis?

Antes de que se desarrolle la psicosis es posible identificar los siguientes cambios en el comportamiento:

  • Problemas repentinos o disminución en el rendimiento escolar o laboral
  • Problemas para concentrarse o dificultad para pensar con claridad
  • Desconfiar en los demás, sentirse observado(a), perseguido(a) o creer que alguien va a hacerte daño (suspicacia).
  • Desinterés por relacionarse con los demás o pasar más tiempo de lo habitual a solas (aislamiento social)
  • Tener ideas o sensaciones extrañas
  • Ausencia de emociones o emociones intensas e inapropiadas.
  • Disminución del cuidado personal o descuido de la higiene personal
  • Dificultad para distinguir la realidad de la fantasía
  • Tener dificultades para comunicarse o hablar de forma confusa

Los síntomas psicóticos no son exclusivos de los trastornos psicóticos

Es importante destacar que los síntomas psicóticos no son exclusivos de los trastornos psicóticos y pueden aparecer en otros trastornos mentales (por ejemplo, en el trastorno bipolar), como consecuencia del consumo de algunas drogas (por ejemplo, cannabis, cocaína, anfetaminas y alucinógenos) o manifestarse de forma muy leve y esporádica en la población general (experiencias psicóticas).

Hay estudios epidemiológicos que han mostrado que las experiencias de tipo psicóticas suelen ser transitorias en un 80% de la población general (desaparecen con el tiempo), persistentes en un 20% y aproximadamete el 7% termina por desarrollar un trastorno psicótico.

Diversos estudios han encontrado que los/as niños/as y adolescentes parecen ser más susceptibles a estas experiencias de tipo psicótico y mientras más temprana sea la edad en la que aparecen, mayor es el riesgo futuro de desarrollar trastorno psicótico en la etapa adulta.

Diagnóstico

¿Necesitas ayuda o conoces a alguien con síntomas de psicosis?

¡IMPORTANTE!

Si identificas cualquiera de los signos o síntomas psicóticos descritos arriba ya sea en tí mismo/a o en algún amigo/a o familiar es muy importante buscar atención médica para obtener un diagnóstico preciso y saber si se requiere un tratamiento.

Recuerda que la identificación temprana ayuda a prevenir.

A continuación puedes descargar un directorio de servicios de atención a la salud mental en México.